El murciélago de Kloncamp

Noelle
3 min readJun 23, 2022

Estábamos sentados en las escaleras, conversando sobre una tarea, probablemente.

Yo venía de hablar con Áurea, estuvimos sentadas en la banqueta, después de mi clase de ballet. Ella me había contado algo que hacía todos los sábados con su hermana, tan distintas pero siempre tan unidas.

Ahora me acompañaba Marco, Marco el chiquito, Elena, como le decían en la secu (El Enano). No decía nada, sólo escuchaba y recargaba su cabeza en mi hombro. La última vez que lo vi, en la fiesta de los 20 años de la prepa, era un hombre muy grande ya, igual de bajito y alegre, pero cansado. Y muy borracho.

Alguien que no alcanzábamos a ver (éramos más personas además de Marco y yo) nos daba instrucciones sobre una asignación, a saber:

Investigar la avería del murciélago de Kloncamp.

De acuerdo, pensé, entiendo lo que es una avería. Una falla, un desperfecto. Por lo tanto, dicho murciélago debe ser una máquina, un mecanismo, un proceso, quizás. Cuando algo se avería, estamos hablando de un objeto inanimado, como un coche, por ejemplo: “íbamos camino a Mar del Plata cuando el coche se averió”.

Un animal o una persona no pueden, por lo tanto, estar averiados. En un organismo vivo, hablamos de heridas, enfermedades, dolores o malformaciones. Esta falla puede ser visible (un hueso roto) o invisible (un órgano funcionando mal), orgánica (detectable de forma material) o psíquica (relativo a los procesos de la mente o de la conducta).

Pero aquí es donde la instrucción se vuelve contradictoria. Están hablando de un animal (un murciélago) que presenta una avería, la cual debemos investigar. Entonces, o se está usando mal el término avería, o realmente no es un murciélago.

Si no es un murciélago, ni una persona, entonces puede ser una máquina, un mecanismo o un proceso que por alguna razón, lleva el nombre de un animal -pero, cuidado aquí- los seres humanos, como siempre rompiendo las reglas, a veces adoptan nombres de animales a modo de apodo. Y se perciben a sí mismos como máquinas, en funcionamiento, híbridas, averiadas, en proceso de diseño, en reparación, en venta o renta por tiempo indeterminado.

Claro. Debe ser eso. O tal vez — volviendo a escaparme de las posibilidades más lógicas- es una falla geológica, mal llamada avería. Y el murciélago de Kloncamp entonces es un lugar. Concluyo: Kloncamp es un lugar, el murciélago es una persona, y la avería es, la falla geológica que hay que estudiar.

Como su nombre lo indica, Klon en alemán es clon, copia idéntica, imitación perfecta, en apariencia, genuino, pero en realidad es solo una falsificación de un original. Y camp pues es campo, campamento. ¿Se imaginan un campamento de clones?

Marquito ya se quedó dormido en mi hombro. Está roncando despacito, y temo el momento en que comience a babear. No sé donde están los demás. ¿Alguna vez estuvieron? La, ¿maestra? que nos dio la instrucción sigue sin estar visible y ahora tampoco audible.

Me quedo pensando en un campo en donde decenas de clones humanos, idénticos hasta en el peinado, con playeras y shorts blancos, ejecutan series de movimientos cuidadosamente coordinadas. Hacen algo parecido al tai-chi. Nadie los dirige, pero todos van muy parejos, aunque no iguales. Se distinguen diferencias en las calidades de movimiento de cada individuo. Al parecer, están aprendiendo a coordinarse. No muy lejos hay una torre de vigilancia donde una persona con binoculares y una capa oscura observa atentamente la actividad. Parece que no se mueve, pero va cambiando muy lentamente su posición para poder cubrir la mayor área posible. El murciélago. Es de noche. Un sistema de iluminación potente, como los que se usan en los estadios, cubre por completo la zona donde están los clones y permite verlos con mucha nitidez.

Atrás de la torre hay un cráter de casi medio kilómetro de diámetro y unos 40 metros de profundidad, que se está empezando a llenar de agua. Un ave blanca, tal vez una lechuza, se acerca volando muy bajo y se para en una ramita cerca del cráter.

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Written by Noelle

Entusiasta del reino animal, el rock alternativo y el queso. Escribo, bailo y yogueo para no enloquecer. linktr.ee/noelleohsi

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